Unas cincuentas familias de refugiados norcoreanos se enfrentan a la deportación de parte del Gobierno canadiense, pese a la aceptación de los yihadistas de parte de las autoridades gubernamentales. Estas familias serían enviadas a Corea del Sur y entienden que serán discriminadas en el vecino del sur, particularmente por haber sido aconsejados a mentir a las autoridades de inmigración al momento de llegar a Canadá.
Muchas de estas familias llegaron al país del norte luego de haber pasado un tiempo en Corea del Sur, ante lo cual ya conocen como serán tratados en la otra Corea. La mayor sorpresa es que estas familias norcoreanas, que cuentan con su solicitud de residencia permanente casi revocada, es que mientras Canadá lleva adelante esta acción, por otro lado viene aceptando la migración de yihadistas.
Desde el gobierno canadiense se realizó una lista con 35 países considerados seguros para los refugiados norcoreanos, donde está incluida Corea del Sur. Casi cinco años llevan muchas de estas familias refugiadas, mientras la apertura de fronteras para yihadistas se realiza sin inconvenientes y cada vez van ganando más espacio dentro de la sociedad canadiense.
FUENTE: Twitter
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