El feminismo disidente toma fuerza en España: “Debemos aceptar la noción radical de que los hombres y mujeres son diferentes”

Con tres meses de existencia, el Movimiento por la Feminidad nació en Sevilla como respuesta al feminismo neomarxista. En dialogó con Elisa Gutiérrez López nos cuenta su surgimiento: la idea de trabajar en conjunto con varones para crecer como movimiento en un plano de igualdad y los ataques contra ellas sufridos de parte del feminismo neomarxista.

¿Cuándo y cómo surge el movimiento por la feminidad?

El movimiento surge en un contexto universitario. A principio de curso se crearon grupos feministas no mixtos en nuestra universidad, lo que causó cierto rechazo por parte de los hombres, que no se sentían acogidos en dichas reuniones. Al principio, nosotras asistimos a varias reuniones. Sin embargo, pronto nos dimos cuenta de que promovían un feminismo marxista que no nos representaba. Por otro lado, también nos desagradaba la idea del sectarismo dado a la hora de no dejar participar a hombres. ¿Cómo pretendemos emanciparnos de ninguna forma si ellos no colaboran con nosotras?

A raíz de esto, hablamos entre tres chicas de dar forma a un proyecto en común que sí aunara nuestros ideales. Pronto se nos unió un compañero, el cual nos aporta la visión masculina. Y luego llegaron el resto de chicas que, como nosotras, no querían dejar que su voz fuera silenciada y tachada de menos feminista por defender unos valores básicos.

¿Por qué esa visión alejada del feminismo tradicional que hoy está ocupando gran parte de los medios masivos?

En primer lugar, consideramos que actualmente el feminismo ha experimentado un boom enorme debido a las redes sociales; no obstante, esto ocurrió hará a día de hoy tres, cuatro años como mucho. Esto lo decimos con conocimiento de causa porque muchas de nuestras filas experimentamos como de un día a otro de repente nuestras amigas se autodenominaban revolucionarias. Desde entonces, se ha implantado una especie de sistema moral a seguir en el contexto cibernético y que luego se ha trasladado a las aulas, donde es mejor persona aquella que es marxista, feminista, animalista y demás corrientes que siguen ese corte. Nos resulta de gran hipocresía cómo ha sido necesario que dichos ideales tornen en moda para ganar adeptos que antes no tenían ni un mínimo interés en el tema.

En segundo lugar, todas las mujeres que conformamos el movimiento estamos de acuerdo en algo primordial: ante todo, somos mujeres. No hombres. Debemos aceptar la noción radical de que los hombres y mujeres son diferentes, y, por ende, sentimos, pensamos y actuamos de forma diferente. Creemos que la emancipación femenina tal y como se plantea nos roba nuestra esencia femenina, además de estar promovida por personas que rechazan a toda aquella que les contradiga.

¿En qué trabajan, o cuáles son los lineamientos principales del movimiento?

Actualmente buscamos expandirnos todo lo posible y acoger en nuestro seno a aquellas mujeres que el feminismo radical, marxista y transfeminismo rechazan y tachan de herejes. Nuestro movimiento tiene apenas tres meses de vida, nos encontramos en plena gestación. No obstante, nos hemos planteado llevar a cabo una campaña de concienciación en las calles de nuestra ciudad (Sevilla), y estamos en proceso de preparación para salir el día que, en breves, anunciaremos en Twitter.

¿Qué puntos las ha alejado del feminismo neo-marxista que ha venido surgiendo?

Creo que es esencial entender que nosotras no somos marxistas. No entendemos el mundo sin un modelo económico que no sea capitalista, pues a nuestro parecer otra alternativa no sería sostenible ni beneficiosa para todos.

¿Cómo trabajan buscando hacer conocer su línea de pensamiento igualitario?

Al principio corrimos la voz en nuestra clase, no sin reticencias debido al miedo que nos daba al principio la contra reacción que podíamos causar (y que claramente hemos causado en las redes). Gracias al boca por boca hemos conseguido reunir a día de hoy a 22 chicas y 2 chicos. Nos reunimos dos veces por semana: lunes y jueves. No contamos, desgraciadamente, con una sede propia del movimiento, aunque no lo descartamos en absoluto en caso de que sigamos creciendo. Hace poco decidimos dar el paso de darnos a conocer por las redes, y, a pesar de encontrarnos con numerosas vejaciones, amenazas y burlas, afortunadamente también nos hemos topado con personas que agradecen nuestra labor y que nos desean un buen viaje, ofreciéndonos su apoyo y extendiendo la palabra.

¿Esa idea de igualdad de géneros como es recibido por las mujeres más extremistas, y que respuestas reciben de los hombres?

Desafortunadamente, las mujeres feministas se nos han tirado encima de una forma muy cruda. Nos han amenazado tanto por las redes como en persona. Nosotras (y digo nosotras intencionadamente, ya que las críticas más duras las recibimos precisamente las chicas que componemos el movimiento, y jamás los chicos) hemos intentado por todos los medios hacer entender nuestro punto de vista, debatir tranquilamente e, incluso, si no piensan como nosotras.

Imagen cortesía @porlafeminidad (www.twitter.com)  – Todos los derechos reservados

Compartir en:

Deja un comentario