Tanto Washington Hernández, cura párroco de la Iglesia de Cordón, como las diferentes voces de la Intersocial Feminista han mostrado una actitud similar en cuanto a lo acontecido en la pasada marcha feminista por el día de la mujer del 8M. La vandalización de la fachada de la iglesia fue ‘minimizada’ por las feministas y el sacerdote del edificio que sufrió el ataque.
Esta situación a generado sospechas de complicidad entre la iglesia católica y el feminismo. Hernández comentó que un ‘grupito’ minúsculo no puede empañar las reivindicaciones que se promovían en la marcha. Las redes sociales no quedaron exentas de esta situación y fueron críticas con la iglesia, particularmente con el temor que le tiene al movimiento feminista y quedar políticamente incorrecto.
El Cardenal Daniel Sturla se reunió, previamente a la marcha, con Teresa Herrera, que es líder de la Intersocial Feminista y desde allí viene teniendo la iglesia un cambio en el tono al discurso crítico que se tenía sobre la ideología de género. La marcha del 8M terminó siendo un triunfo feminista al dar el brazo a torcer a la iglesia.
Este acercamiento entre iglesia y feminismo fue criticado en las redes sociales por el éxito del lobby feminista que puede ser el punto de partida para sumar a los LGBTI. El papa bolche también fue eje de críticas al cambiar de discurso y ‘arrodillarse’ ante el poder que demuestran estas nuevas corrientes de poder en el siglo XXI.
FUENTE: Subrayado