Theresa May sufrió la ira de los neomarxistas y sus tácticas de intimidación. La parlamentaria conservadora se vio perjudicada por las ataques vandálicos al ser orinada la puerta de su oficina en el marco de actividades que se dan contra conservadores durante la campaña electoral general.
Símbolos nazis y frases agraviantes se han podido observar en carteles conservadores, sin embargo, el ataque sufrido por Theresa May fue de mal gusto. Se han podido observar varios ataques de esta índole hacia femeninas que son candidatas del partido conservador.
Todos aquellos que respaldaron a los atacados terminaron sufriendo en sus redes sociales respuestas abusivas. La dureza en la campaña ha sido eje de debate en programas televisivos y radiales, donde se ha planteado el uso de tácticas intimidatorias por estos grupos neomarxistas que están buscando abrirse espacio en la política europea con un comportamiento destructivo.
La parlamentaria May comentó que no fue la única que sufrió estos ataques, y que particularmente la mirada estaba puestas en las candidatas del partido conservador. Sobre el ataque con orina en la puerta de su oficina comentó que “este tipo de comportamiento no tiene cabida en nuestra democracia … y podría poner a gente buena de servir en esta Cámara”.
FUENTE: Express – The Telegraph
