El ataque hacia el ‘blanco’ con un racismo marcado, y que está visto como aceptable por un amplio espectro de la sociedad y los medios de comunicación. Un ejemplo de ello es Rachel Dolezal, una activista que ha sido señalada por cometer apropiación cultural y fraude, de la cual los propios padres han comentado que es una mujer blanca que se hace pasar por negra.
Cada vez más personas tienden a transformarse en ‘trans-raciales’, como parte del crecimiento del racismo anti-blanco que hay en las redes sociales. Dolezal es un ejemplo de los más extremos de esta ‘inmersión’ en esta nueva figura que apuntan al racismo extremo hacia los blancos.
Hoy en día, hasta los propios blancos escapan a su historia cultural buscando acomodarse con lo políticamente correcto, o simplemente para no sufrir ataques en las redes sociales. Negarse a ser blanco o ser un ‘trans-raciales’ es hoy una opción para evitar la discriminación que crece a diario hacia esta etnia y el ‘supuesto’ dominio en la historia de la humanidad. El siglo XX tuvo a los inmigrantes queriendo sentirse blancos, en materia de comidas, estilos de vida y expresiones idiomáticas, estructuras familiares y tradiciones, este nuevo siglo ha generado un cambio con hecho de sentirse anti-blanco y amoldarse al nuevo contexto del sentir políticamente correcto.
FUENTE: HuffPost