Una mujer de poco más de treinta años fue violada por cinco inmigrantes en la localidad de sueca de Visby. La señora, que usa silla de rueda por su discapacidad, fue atacada luego de solicitar usar el baño en el centro de asilo que se encontraban los refugiados.
Luego de ser detenidos por el crimen cometido, los agresores fueron puestos en libertad generando la indignación de la sociedad y algunas reacciones favorables a los atacantes que sorprendieron. Luego de una primera protesta pacífica por el suceso, quienes comandaron esta acción recibieron críticas y aprietes de diversos orígenes, entre ellos de partidarias del Partido de Iniciativa Feminista.
El neomarxismo convocó a una contramarcha para apoyar a los refugiados agresores, alegando que están siendo “chivos expiatorios”. El lema de la movilización “Contra el racismo y el sexismo”, apoyando a los cinco inmigrantes que violaron a la mujer discapacitada, sorprendió por el apoyo desde las agrupaciones feministas en desmedro de la situación violenta y el ataque que sufrió la señora en sillas de rueda.
FUENTES: Diversity Macht Frei, Sputnik News, Mirror.co.uk.