La psicopatología de la autora del secuestro internacional extorsivo del caso Pedro Laurta, es clave para comprender que las falsas denuncias y los secuestros parentales no surgen de la nada sino que son manifestaciones delictivas extremas de patrones más amplios de violencia femenina: comportamientos coercitivos, hostigamiento y acoso.
En el caso Pedro Laurta, las peculiaridades psicológicas de Giardina se habían vuelto evidentes ya en los primeros meses de interacción con el padre de Pedro: conductas impulsivas, hipersexualidad, una necesidad compulsiva de engañar y mentir indiscriminadamente comienzan a develarse desde el inicio.
Desde amenazas de aislamiento social y recriminaciones, la gravedad de las amenazas escalaría – al acercarnos al secuestro del niño – a extremos como encarcelar a Laurta mediante denuncias falsas, empujarlo al suicidio, secuestrar a su hijo, exponerlo a abusos sexuales y físicos que derivaran en su muerte.
Al mediar un embarazo – y a pesar de que las actitudes de Giardina ponían en duda la paternidad de Laurta – éste se compromete a estar presente y asistirla en desarrollar su personalidad para que le permita encarar la responsabilidad de su futura maternidad adecuadamente.
Es en este contexto que luego de lograr su objetivo de venderle la casa afectada a Laurta, Giardina comienza a destratarlo y ante las protestas de Laurta, termina la relación.
Primeras manifestaciones de acoso y hostigamiento a Laurta y a su pareja en 2019
Ya en Uruguay, Laurta rehace su vida emprendiendo una relación de pareja con otra chica. Giardina interpreta esta relación de pareja como una afrenta personal a su orgullo y comienza una intensa campaña de acoso y hostigamiento contra Laurta y su pareja:
- Acosa a Laurta con llamados y mensajes constantes.
- Contacta a sus espaldas a su familia para inducirlos a creer que su pareja formal y pública es en realidad su amante.
- Envía mensajes amenazantes a Laurta ej. «¿Estás seguro que querés seguir con ella? Mirá que te estás quedando solo» en relación a los intentos de Giardina de alienarlo del resto de su familia.
- Contacta por redes sociales a la pareja de Laurta y a la familia de ella para sabotear dicha relación. Ej. Este mensaje enviado por Giardina a la madre de la pareja de Pablo Laurta luego de haber ingresado a su perfil de Instagram y haberla insultado a ella y a su hija.
Laurta intentaba balancear su relación en Montevideo, con la presencia de Giardina en Córdoba, cursando un embarazo del que, al no tener forma de saber si era el padre o no del niño, no se quería completamente desvincular.
Hacia fines del 2019, habiendo ya nacido Pedro y haber sido reconocido por Laurta como su hijo, el acoso por parte de Giardina llegó al extremo de analizar las fotografías que subían Laurta y su pareja a las redes para identificar el hotel en el que se alojaban y enviarles mensajes amenazando con presentarse en el Hall del hotel para increparlos.
El acoso era contínuo. Giardina comentaba publicaciones de Laurta acosándolo sexualmente, comentaba en publicaciones de la pareja de Laurta con fotografías del pequeño Pedro, y enviaba mensajes cargados de insultos contra Laurta y su pareja.
Los mensajes de Giardina llegaron incluso a ser recibidos por la madre de su novia, quien fue insultada por Giardina en los comentarios de sus fotografías de Instagram.
Aislamiento social y celos
Una vez Laurta se separa de su pareja, Giardina procede a intentar sabotear sus demás vínculos sociales. No solamente las conocidas de Laurta comienzan a recibir mensajes agresivos de Giardina…
Sino que su propia familia comienza a ser manipulada para generar rencillas internas y animosidades en su contra, debiendo Laurta exigir a Giardina que no se comunique a sus espaldas con su familia para evitar los conflictos.
Los celos enfermizos se mantuvieron intactos hasta la sustracción misma de Pedro, con la misma regularidad de mensajes agraviantes contra Laurta.
Accionar psicopático.
La técnica utilizada por Giardina para la manipulación es siempre la misma. Se presenta con una amabilidad impostada hasta que cree poder sustraer de la persona lo que pretendía.
Coacción y Amenazas
Las pasadas capturas representan un claro hostigamiento contra Laurta y su círculo social, no parecen revestir en general un riesgo de daño grave para terceras personas. Pero la oscuridad de la imaginación de Giardina comienza a revelarse gradualmente en una serie de mensajes que adelantan una perversidad que se acabaría materializando con la instigación, asistencia y complicidad de varias integrantes del movimiento feminista.
Uno de los mensajes más lúgubres emitidos por Giardina es un estado de Facebook publicado en Julio del 2022, en el cual Giardina lista una serie de acciones dañinas que «algunas mujeres» emprenden, en un tono superficialmente crítico.
A partir del secuestro de Pedro, Giardina sigue en sus acciones como si fuera una manual esta lista, develando el carácter premeditado de la maniobra.
Estas acciones, van en un crescendo de gravedad desde la desvaloración y deshumanización del padre, hasta su encarcelación injusta e instigación al suicidio llegando al extremo del abuso infantil y el asesinato de un niño (Lucio Dupuy), dejando a las claras el riesgo real de abuso e incluso muerte, en el contexto en que la justicia de Córdoba ha abandonado a este niño.
