Una mujer violada por otra hace dieciocho años, puso su historia en conocimiento y la misma se viralizó por lo cruda y desgarradora.
La afectada contó cómo fue agredida físicamente y salvajemente violada por una desconocida en un lugar público.
Una vez que se escapó del ataque y tras ducharse al llegar a su domicilio, con todo el pudor, encontrándose llena de moretones le contó a su compañera la situación. La reacción de la mujer, descreyendo que fuese atacada por una persona de su propio sexo, la terminó por destruir y hacerla sentir aislada.
La mujer atacada manifestó que tanto las féminas como los varones pueden ser crueles y apuntó a la falta de comprensión sobre las relaciones sexuales entre mujeres y la posibilidad de una violación producto de una ataque de una femenina a otra.
La poca comprensión de su pareja le pareció un indicio de lo que pasaría en caso de reportar su situación a la policía. La mujer decidió investigar este tipo de ataques y no se encontró con datos estadísticos, además de tener el inconveniente del silencio de muchas mujeres que sufren ataques de este tipo. La viralización de esta situación es una muestra del cambio de la sociedad ante estos temas que han estado ocultos por varias décadas y hoy la realidad comienza a golpear la puerta de las feministas.
FUENTE: Teletica
