En el pueblo alemán de Wallenfels, una mujer de 45 años fue encontrada culpable de homicidio involuntario y condenada a 14 años de cárcel por la muerte de cuatro de sus hijos recién nacidos, según informaron medios alemanes.
Los cuerpos de ocho bebés fueron hallados en la casa de la mujer en 2015, pero ella solo fue acusada de la muerte de cuatro infantes debido al avanzado estado de descomposición que mostraban los otros cuatro cuerpos.
Las autoridades revelaron que la madre, la cual admitió en una audiencia previa su participación en la muerte de los recién nacidos entre 2003 y 2013, ponía a los bebés en toallas e incluso sin saber si tenían vida para deshacerse de ellos.
Los fiscales habían acusado a la pareja de «egoísmo sexual, indiferencia e insensibilidad» sobre el manejo de los embarazos porque, aunque no querían tener más hijos, continuaron teniendo relaciones sexuales sin tomar cuidados, aseveraron los fiscales. La Justicia absolvió al hombre de los cargos de negligencia por no detener las muertes.
El caso horrorizó a los alemanes, pero lo que generó polémica fue el fallo porque muchos esperaban que la mujer fuese sentenciada a cadena perpetua, algo que no sucedió.
FUENTE: bbc.com
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