En un caso que ha generado gran atención, una joven de 23 años de Pamplona ha sido condenada a seis meses de prisión por un delito de agresión sexual después de tocarle el trasero a un joven en una discoteca. Aunque el incidente tuvo lugar en febrero de este año, la sentencia se dictó recientemente.
Tocamientos sin permiso
Según los hechos probados en la sentencia, la mujer entró en la discoteca y, con intenciones libidinosas, agarró el trasero del joven de manera lasciva. A pesar de que el joven la enfrentó y expresó su incomodidad, la agresora volvió a tocarlo antes de que él decidiera abandonar el local y reportar lo sucedido a la Policía Municipal de Pamplona.
La resolución del juicio resultó en una condena de seis meses de prisión, dos años de libertad vigilada y una indemnización de 300 euros para la víctima. Además, se prohibió a la condenada trabajar en profesiones que impliquen contacto con menores de edad, y se aplicó un atenuante de toxicomanía debido al uso de estupefacientes.
Legislación actualizada
Esta sentencia se basó en la reciente reforma de la ley del «solo sí es sí», que establece que el consentimiento explícito es esencial en todas las conductas sexuales y que cualquier acto sin consentimiento se considera una agresión sexual.
Sin embargo, esta ley ha generado críticas y controversia, ya que algunos argumentan que ha llevado a la liberación o reducción de penas para agresores sexuales, debido a la unificación de los delitos de abuso y agresión en un único tipo delictivo. Los detractores argumentan que esta «laguna legal» ha permitido a algunos condenados ajustar sus penas según la nueva ley, lo que ha suscitado preocupaciones sobre la efectividad y la justicia del sistema legal en casos de violencia sexual.