Una adolescente de 17 años, en la ciudad danesa de Sønderborg, violó la ley de armas al usar el spray de gas pimienta ante un varón que procuró bajarse los pantalones delante de ella. La menor notificó a la policía por ser agredida sexualmente en una calle cercana al centro cultural de la localidad.
Ante la ilegalidad del uso de estos sprays la joven fue detenida, las autoridades locales conocen que los daneses viajan hacia Alemania en busca de este tipo de aerosoles para cuidarse de los ataques sexuales. Muchos países europeos tienen prohibidos el uso de estos spray irritantes como también el uso de armas de choque eléctrico.
Esta situación, sufrida por la adolescente danesa, es un antecedente negativo para todas las mujeres que andan precavidas con estos spray pimienta en sus carteras, ya que, pueden ser detenidas por utilizar una herramienta prohibida y terminar en la cárcel o con algún tipo de procesamiento. El feminismo saldrá a pedir por esta joven y el resto de las mujeres o se mantendrá en silencio por conveniencia.
FUENTE: The Washington Post
