Si el tráfico de personas en todas sus formas es un fenómeno deleznable. Pero cuando afecta a los niños por algún motivo resulta todavía más horroroso. La situación de inestabilidad en Afghanistán, ha generado lamentablemente que el país se haya convertido en uno de los centros a nivel mundial de tráfico de personas. Contrario a la creencia que se promueve desde los medios las víctimas principales de este tráfico son los niños varones. Repasaremos algunas de las razones:
Una de las principales razones al tráfico de niños y niñas en Afganistán es el aspecto sexual, generalmente vemos a las niñas que son vendidas al mejor postor como esclavos sexuales, lo mismo que ocurre con las niñas yazidis, en el Estado Islámico. Pero no se escucha de la misma forma hablar de los niños que son vendidos con el mismo propósito, el de obrar como esclavos sexuales de sus dueños, con el especial estigma de la sodomización que existe en los países musulmanes.
Un segundo aspecto es el trabajo forzado, allí nos encontramos con el uso de los niños para el tráfico de drogas o trabajar en redes callejeras como mendigos. Parte de esta causa se basa en los problemas económicos y de conformación familiar que tienen los hogares afganos.
El reclutamiento de niños para grupos militares es otra de las causas del crecimiento del tráfico de niños varones en Afganistán. A los niños traficados con este objetivo en particular, se los adoctrina para que respondan a la ideología fundamentalista islámica y se los entrena para satisfacer las necesidades de estos grupos extremistas.
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