A cuatro años de asesinar, descuartizar y hervir a su marido en una olla, Roxana Valdés recibió la libertad condicional de parte de la justicia feminista chilena. La información confirmada a los medios trasandinos la realizó el propio abogado de la mujer, quien explicó los beneficios intrapenitenciarios a los que accedió.
El juicio llevado a cabo en 2015, y le dictaminó seis años de cárcel por el asesinato de su pareja. La ley chilena no castiga el cercenamiento del cuerpo luego de muerto, eso fue un primer beneficio para la baja pena impuesta que ahora permite la libertad de la condenada, pese a que el abogado dejó entrever que cualquier ‘desliz’, puede llevarla a la cárcel nuevamente.
La buena conducta, la escolaridad que llevó adelante y la aprobación de un consejo técnico de Gendarmería fueron pilares para la liberación de esta mujer. La Corte de Apelaciones de Talca terminó por otorgarle la libertad con apenas la mitad de la pena cumplida por asesinato.
FUENTE: La Tercera