La Ley Integral contra la Violencia de Género (LIVG), que se ha implementado en España, va camino a un recrudecimiento de su accionar con el silencio del establishment político español luego de un pacto secreto. Junto con la aplicación de la LIVG se han instaurado 106 tribunales que suelen dedicarse únicamente a juzgar varones.
Mientras la violencia doméstica es aquella que acontece en el hogar, y puede ocurrirle tanto a mujeres como varones; la violencia de género es sexista y solo puede ser cometida por un varón. La ley española LIVG deja en claro que si un masculino ataca a un mujer es puramente sexista y por problemas de género.
Ante una llamada por violencia, el varón pierde todo derecho como primer paso, es culpable por defecto. Con la denuncia se pierde la posible custodia, como así también cualquier derecho que pueda llegar a tener en caso de haber hijos en la pareja. Luego viene la parte ardua de demostrar su inocencia, con jueces que están presionados para llevar a prisión todo varón denunciado.
Los movimientos feministas han conseguido que se oculten la verdad sobre la violencia doméstica, los varones asesinados por sus mujeres, los infanticidios cometidos por madres y, como parte de la mentira del feminismo, que la violencia doméstica es iniciada en un 99% de los casos por varones, dejando el restante uno por ciento a lesbianas. El apoyo del establishment político español a esta ley y sus crudas leyes hacia los varones, es una muestra del poder feminista en la península y como apoyan para quedar políticamente correctos.
FUENTE: Daily Stormer
