Crece cada vez más en España el grupo de Mujeres indignadas por que las ex-esposas de sus maridos los están arruinando económicamente al basarse en la ‘justicia con perspectiva de género’. Cada vez es más asfixiante la situación de las familias con esposos divorciados, particularmente en lo emocional y economía, ante los diferentes requisitos y cumplimientos que las ex-esposas y la justicia hace al favorecer los intereses del primogénito.
La Asociación de Segundas Mujeres (ASM) cuentas con unas 800 integrantes, son mujeres que han formado una nueva familias con divorciados y hoy se encuentran en una encrucijada ante el constante reclamos de las ex, de sus actuales esposos, en materia de presencia, reclamo monetario y poner a los hijos en común como rehenes de la situación.
Los niños suelen ser utilizados para entorpecer la relación actual de su padre, y en algunos casos, las novias de los ex deben ayudar monetariamente, por la injusticia de la ‘perspectiva de género’. Muchas integrantes de la ASM han dejado la experiencia de denuncias falsas de parte de las ex-esposas y, ayudadas por la justicia feminista, consiguiendo dilatar los divorcios y fortalecer los vínculos con sus hijos.
En muchos casos, estas nuevas parejas no llegan a casarse ante la posibilidad que la justicia realice el embargo a su actual pareja, para beneficiar a los primogénitos con la primera esposa, aunque haya hijos en la nueva familia. La destrucción económica, que hace la justicia, de los segundos matrimonios de varones separados preocupa a sus nuevas esposas que sienten, en carne propia, la ira del feminismo y la perspectiva de género.
FUENTE: No todas somos feminazis