Un grupo de feministas, en España, decidió salir con pantalones blancos manchados con sangre en clara alusión al ciclo menstrual y su desafío al pudor que genera, desde su punto de vista, esta situación se dió con la denominada caminata “Menstrual Blood”.
Esta protesta se enmarca en una crítica, de perspectiva feminista, al sistema patriarcal por oprimir al género femenino durante el período menstrual y la censura que les hacen vivir en dicho proceso. Este colectivo promueve esta situación con mujeres sangrantes buscando desafiar, con un acto de carácter político, un cambio en la mentalidad de la sociedad.
Los grupos feministas van contra un proceso natural de las mujeres atacando al patriarcado e inculpando de posibles situaciones de humillación pública al mismo. Ya son varias las artistas de índole feminista que han realizado acciones vinculadas con la menstruación y como, desde su punto de vista, es humillante en el relacionamiento social el sangrado que se produce luego de no ser el óvulo fecundado.
“Mancho pantalones y no estoy enferma” fue el lema de esta marcha que busca expandir está ideología extremista sobre la menstruación y la humillación que genera en la sociedad. Este planteamiento feminista va contra la propia naturaleza de la mujer y la máxima expresión de su ser.
FUENTE: El Desconcierto