Care Norway ( Cuidado Noruega ), una organización feminista, recientemente publicó un video viral en Youtube titulado «Querido papá, algún día me dirán puta». El video, diseñado para jugar con los sentimientos de preocupación e inseguridad, especialmente de las mujeres, es un ejemplo paradigmático del relato feminista de victimización de la mujer y demonización del varón.
El video repite los clasicos eslóganes feministas, como la idea de que «ser una mujer en occidente es una de las cosas más peligrosas del mundo» ( ¿Nunca van a compararlo con lo que es ser una Yazidi bajo el ISIS no? ), que el sexo entre personas alcoholizadas es equivalente a una violación, o que las bromas entre varones llevan a la violencia contra las mujeres.
Compartimos la respuesta de Deion Kathawa al video, ( perdón que no es en video pero no nos financia el estado noruego ).
Querido Papá,
Por favor perdonala. Debe haber recibido esas ideas inútiles, oscuras y misantrópicas de la revista para mujeres que la he visto leyendo.
Es verdad papá, que algunos de mis amigos le dicen a algunas mujeres cosas feas, y eso está mal. Trato de decirles siempre que puedo que eso es inapropiado, pero generalmente no me dan bola.
Pero todos son malos con todos, Papá, no es solo los varones con las chicas. Las chicas muchas veces les dicen cosas horribles al chico que gusta de ellas pero no es correspondido, aún cuando claramente hace lo mejor que puede, de la mejor forma que conoce para demostrarle su aprecio. Las chicas le van a enviar mensajes contradictorios para mantener viva su esperanza solo para poder divertirse a costas de humillarlo. Vivir eso también lastima. Bastante.
Ninguna de estas cosas justifica la otra, por supuesto, pero ¿No deberíamos estar todos interesados en ser mejores personas Papá? ¿Por qué la gente es tan malvada entre sí?
Siempre es más fácil atacar al otro, al grupo de enfrente, para pintar a todos los que integran ese grupo como igualmente horribles. Eso es lo que hizo Papá.
Quizás deberíamos aceptar que todos tenemos problemas, chicos y chicas por igual, y trabajar juntos para mejorar las cosas en lugar de apuntar a la otra mitad de la humanidad con reclamos que contienen un nauseabundo lastre de chantaje emocional, pero muy poca información o sustancia. Quizás deberíamos dejar de ignorar todo lo bueno que un sexo hace por el otro, todo lo que hizo y todo lo que hará.
Estoy en una fiesta ahora, Papá. Puedo verte decepcionado de verme acá. Sos un tipo tan anclado en la realidad… Debería estar estudiando o algo, lo sé. Pero todos mis amigos están acá, es noche de viernes y ya terminamos los parciales.
Todo el mundo está tan detonado y bailando tan ridículamente. Es oscuro, ruidoso y todos están rebotando uno contra otro y chuponeando en lugares extraños. Y el olor: A cerveza, sudor y hormonas, pero también a desesperación, soledad, e inseguridad. Realmente me querría ir.
Ojalá pudiera explicarle a toda esta gente, sobre el ruido del reggaetón, que la felicidad no está en levantes pasajeros, o en cuán borrachos se pongan, sino en relaciones basadas en una profundo compromiso y confianza mutua. Desearía que desde ambos lados pudieran ver que solo están usando al otro para obtener un placer momentáneo y que no hay nada perdurable y que realmente te llene para conseguir aquí.
Recién me dijo que la violaron. Estoy tan enojado Papá! No me reconocerías. Que un hombre, – que no merece ser llamado así – que una basura viole a una mujer es impensable para mi. Está más allá de mi comprensión así como de la mayoría de mis amigos, así como lo es para vos, lo sé.
Pero no todos los chicos tienen tan buenos modelos de padre a seguir, modelos que los enseñan a respetar a las mujeres. Alguna gente se queda con «enseñarle a los chicos a no violar». Yo pienso que es una vergüenza. Creo que en vez de culpabilizar a los chicos, tendríamos que ayudarlos a canalizar sus instintos de protección, y amor por los retos, dirigirlo hacia el respeto y la celebración de las mujeres porque eso es lo que está bien.
No deberíamos quedarnos con soluciones a medias que asumen que TODOS los hombres somos un «problema» a resolver: Brutos que necesitamos ser distraídos para no lastimar a nadie hasta que nos muramos. Sé que si hubiera estado ahí, hubiera hecho todo para moler a palos a ese desgraciado hasta casi matarlo, como creo que lo hubiera hecho casi todo hombre en este planeta.
Lo siento Papá, no tengo mucho tiempo. Me está hablando de los problemas en su matrimonio como si nadie más los tuviera; especialmente yo en este momento. La mujer que amo, este… no creo que siga sintiendo lo mismo conmigo ahora.
Realmente no sé qué pasó, y no sé si es mi culpa. He estado quedandome despierto laburando hasta tarde, tratando de proveer de todo lo necesario a ella y a nuestros hijos, y al final del día estoy cansado. Tan cansado que no estoy del mejor humor a veces. No sé cómo hacer para mantenernos a flote, mantener vestidos a los chicos, ni siquiera dónde vamos a vivir.
Trato de no hablar de estas cosas con ella, porque no la quiero preocupar. Pero cuando trato de explicarle estas cosas, simplemente no quiere escucharlas. No le gusta hablar de plata, así que no digo nada.
Papá. … Me pidió el divorcio.
Y ahora así, en un parpadeo, me deja y se lleva a nuestros hijos con ella. Estoy solo ahora, y es navidad. Estoy solo y mi familia ya no está, estoy tan enojado y confundido. ¿Cómo pudo haberme pasado esto?
Dijo cosas horribles, dañinas y falsas sobre mi en las audiencias de divorcio. Fué como que la mujer a la que amé por la mitad de mi vida, por la que trabajé incansablemente para que no nos faltara nada, se hubiera olvidado completamente de quien soy, como si yo ya no existiera o fuera un extraño cualquiera.
Yo solamente intenté ser el mejor esposo y padre que podía para demostrarle mi amor. Supongo que no fué suficiente.
Todo es tan oscuro ahora. He encontrado algún consuelo en la bebida, después del divorcio… después de perder el trabajo. Me acuerdo que tomabas un poco de whisky cada tanto, para celebrar en ocasiones especiales. Ya no tengo ocasiones especiales, ahora solo tomo…
Lo siento, viejo… Es demasiado. Pero no estés triste. Hiciste lo mejor que pudiste. Pero es lo que se puede hacer por tu hijo cuando las palancas de la sociedad, las mismas que con tu trabajo ayudás a empujar, se vuelven contra vos, para atacarte, despojarte de todo lo que querés, y demonizar tu mera existencia.
Ojalá la gente se diera cuenta que todos tenemos problemas, y que la única forma de resolverlos es que todos, varones y mujeres por igual, unamos las manos y reconozcamos nuestra mutua necesidad por el otro. Creo que tendríamos una chance de mejorar las cosas desde ese punto de partida.
Querido viejo: Ese es mi deseo. Espero que se vuelva realidad, por el bien de todos. Chau papá, por favor perdonala, y perdoname a mi también. Te quiero.