La actriz de Game Of Thrones salió al cruce de la ideología feminista planteando que los hombres en la televisión son tratados como objetos tanto como las mujeres.
Su opinión está en la línea de la de su compañero de elenco en la serie Kit Harington, actor que interpreta el personaje de Jon Snow, quien había comentado previamente sobre cómo era tratado como si solo fuera un cuerpo, y no una persona, por los medios.
La experiencia de Harington y Dormer contradice la construcción teórica feminista, según la cual las mujeres son «tratadas como objetos», y de esta forma «oprimidas» por un supuesto «patriarcado».
Fuente: The Guardian