La capacidad de los estudiantes asiáticos siempre se ha destacado, particularmente con la globalización y la expansión de las familias que desde Asia han salido hacia otros puntos del globo.
Ello permitió verificar la diferencia que en terminos generales las personas oriuendas del este asiático suelen tener respecto de sus contrapartes con otro background racial.
Víctimas de la «discriminación positiva»
La inteligencia de los jóvenes asiáticos es uno de los puntos que destaca y por ese motivo, sin embargo, están siendo penalizados en las universidades estadounidenses. Los programas de discriminación por raza denominados «acción afirmativa» por parte de sus impulsores dentro de la izquierda norteamericana, buscan que las componentes raciales de las universidades reflejen la relación poblacional entre razas del conjunto de la población, dejando de lado los méritos, el esfuerzo y las condiciones naturales de los estudiantes.
Los estudiantes asiáticos, generalmente más aplicados e inteligentes que el resto, a pesar de ser una minoría son castigados por el sistema que los obliga a ser mucho mejores que los demás para ganarse un lugar que para las demás agrupaciones raciales es más fácil.
Poniendo en jaque a la lectura neomarxista de la desigualdad racial
El incómodo éxito académico y profesional de los asiáticos ilumina el hecho de que ser una minoría no basta para explicar los malos índices de adaptación de negros e hispanos en Estados Unidos respecto a los índices de la población blanca mayoritaria, como denuncia el discurso neomarxista hegemónico y «políticamente correcto». Los asiáticos a pesar de ser una minoría, reportan índices de salario, y logros académicos superiores al de los propios blancos y los menores índices de criminalidad.
FUENTE: Los Angeles Times
