Ayelet Shaked, Ministra de Justicia israelí, sigue sosteniendo la propuesta de una ley estado-nación para Israel, aunque se deban administrar los derechos civiles pudiendo llegar a estar los mismos sobre los propios derechos humanos. Shaked cree en ‘judaizar’ Galilea y mostró lo positivo de cercar el ingreso de migrantes de países como Sudán y Eritrea.
Este controversial proyecto sobre el estado-nación judío está orientado a la mayoría de la población local aún teniendo que violar los derechos humanos según aquellos que lo apoyan. Según Shaked se está buscando la defensa de la seguridad de la población por sobre cuestiones democráticas, sin embargo se busca bloquear el ingreso extranjero con un duro control de las fronteras.
Este proyecto procura evitar las sentencia de la Ley de Entrada a Israel, que han permitido el ingreso de árabes a todas aquellas que han tratado de impedirlo al entender que es discriminación. “Los valores nacionales y judíos no están consagrados” entiende la ministra que procura la seguridad nacional por sobre las herramientas constitucionales actuales y los derechos universales de las personas.
FUENTE: Haaretz