Un oficial de investigación asignado a los atentados terroristas de París, sucedidos en Noviembre del 2015, expuso en un testimonio que las víctimas de estos atentados fueron torturadas antes de ser asesinadas.
A los hombres, los islamistas les sacaron los ojos y los castraron, a las mujeres, las torturaron sexualmente, apuñalaron, decapitaron. Además, evisceraron, es decir, le sacaron los órganos vitales del cuerpo a las personas.
Esta sería la razón por la que las autoridades francesas o habían dejado ver los cuerpos de las víctimas, por lo que no fue sino hace pocos días que el público en general logró informarse de los horrendos pero reveladores detalles de esta atrocidad.
¿Es posible que nuestros gobiernos estén cubriéndole las espaldas al islamismo?
Este ocultamiento surge en medio de un escándalo en redes sociales por un doble estándar que se ha aplicado desde los gobiernos y los principales medios de comunicación de occidente. Las imágenes de los «refugiados» ahogados se muestran por todas partes, allí los señalados como culpables, somos nosotros los occidentales, pero los cuerpos de las víctimas de los atentados islamistas, como los culpables son musulmanes, son censuradas con el objetivo declarado de protegerlos de un supuesto odio de los occidentales. Esto parecería develar claramente una mayor preocupación desde los gobiernos por proteger a los inmigrantes musulmanes que por proteger a su propia población nativa que es quién está siendo blanco de ataques terroristas a manos de quienes son protegidos por el gobierno y los medios.
Algunos analistas están manejando la hipótesis de que los gobiernos en occidente se encuentren infiltrados por intereses islámicos, habiendo reportes incluso de que la familia real saudita, inmensamente rica, y que ya controla parte de la infraestructura mediática en occidente, financia ilegalmente campañas políticas en occidente, lo que generaría una deuda de favores que podría estar explicando las actitudes en apariencia masoquista de gobiernos y corporaciones mediáticas en occidente.