En Uruguay, se esta dando una escalada de violencia mediática y social en contra del varón; a muchos les podrá parecer ridícula esta denuncia, pero es ciertísima, puesto que se ha demostrado, cómo la cantidad de varones violentos son una ínfima minoría en relación al número total de hombres en nuestro país.
Doble discurso
Hemos visto cómo existe un doble discurso instalado en nuestra sociedad, gracias a la moral progresista; según el mismo, cuando un hombre asesina a una mujer, estamos ante un terrible delito de «género» (los ignorantes le llaman «género» al sexo, cuando género en realidad significa especie; será porque lo sacan del inglés «gender»; en fin, la ignorancia está presente en todas partes); pero cuando es una mujer que asesina a un hombre, estamos ante un crimen común y corriente.
¿Por qué se da esta asimetría?
Se da por el sencillo hecho de que en la sociedad actual está instalado un feminismo anti-varón, que proclama la supremacía del sexo femenino y la superioridad moral de la mujer.
La denominada «ideología de género», no es más que el feminismo anti-varón, cuyo objetivo es disminuir al varón y humillarlo en todos sus aspectos. Por eso, yo pienso que el feminismo no es sólo malo para los hombres, sino que es una de las peores estafas que se le han hecho a las mujeres, ya que le prometen más derechos, pero al final sólo la terminan oprimiendo.
Incoherencia Feminista
Por supuesto, las feministas «radicales» son muy incoherentes, porque ellas quieren seguir teniendo todos los viejos privilegios que tenían las mujeres durante el imperio del patriarcado y la caballerosidad, ellas quieren que los hombres sigan siendo caballeros, le cedan el asiento, si ven a una mujer embarazada, la dejen ir primera en la fila, etcétera, etcétera; pero ahora también quieren el «derecho» a través del divorcio de estafar a un hombre impunemente, robándole la mitad de todas sus pertenencias y el «derecho» a hacer de su voluntad la vida y los derechos de sus propios hijos…
El feminismo actual es incoherente y sólo termina dañando a las mujeres y destruyendo a la familia.