Según datos oficiales publicados por el Ministerio del Interior, el número de homicidios (25) calificados como «femicidios» por organizaciones feministas, (cifra difundida con colaboración de Diario El País) representaron apenas un 8,8% del total de homicidios (258).
Estos datos, develan la exagerada cobertura mediática que ese 8,8% de los homicidios recibe, por servir su difusión a los fines políticos del movimiento feminista, un gran comprador de publicidad.
Cabe destacar también la ampliación propagandística de la definición de «femicidio» que ha llevado adelante este año el feminismo, aplicándola, para inflar los números, no ya solamente a los homicidios de mujeres cometidos por sus parejas o ex-parejas, sino a asesinatos de niñas, como ocurrió en el caso Brisa, o incluso al asesinato de una anciana.
La cifra de femicidios se ha mantenido debajo de los 30 casos anuales, durante los últimos 4 años. La tasa de homicidios también permanece relativamente estable en este período, pero siempre oscilando en una cifra 10 veces mayor, entre los 250 y los 300 casos anuales. Estos datos, reflejan el ensimismamiento ginocéntrico del movimiento feminista al solicitar que se declare en Uruguay una «emergencia por femicidios», excluyendo de su recalmo a 9 de cada 10 víctimas fatales de la violencia.
Datos: Ministerio del Interior