En México, como en varios otros países, se han puesto en práctica a instancias del movimiento feminista políticas de segregación por género en el transporte público que traen reminiscencias del apartheid y la segregación racial en el sur de Estados Unidos.
Desafiando la segregación:
En un episodio ocurrido recientemente un hombre mexicano protagonizó una discusión con el pasaje de uno de estos «vagones rosa», reivindicando el derecho a la igualdad de trato entre hombres y mujeres.
Justificación de estas políticas:
Estas políticas se justifican entorno a la prevención del acoso sexual, pero cargan un fuerte contenido de desprecio hacia los varones en general, quienes son excluidos de medios de transporte público por motivo de su género.