Quien concurra a la casa central del Scotiabank en Uruguay, ubicada en Rincon y Misiones, Ciudad Vieja, podrá observar roll-ups con los colores de la bandera LGBT y el mensaje superpuesto «la inclusión nos hace fuertes».
Dado que se trata de un banco, sería fácil pensar que este slogan se refiere a la controversial ley de inclusión financiera que obliga a los ciudadanos uruguayos a utilizar tarjetas de débito para el cobro de sueldos entre otros servicios bancarios. Sin embargo, el mismo slogan es utilizado por el banco en el exterior.
El banco participó también de la marcha del orgullo gay en México blandiendo el slogan «Orgullosos por las diferencias que nos unen».
La casa central de Scotiabank está ubicada en Toroto, Canadá. El país norteño, gobernado por un ícono de la masculinidad afeminada propuesta por el feminismo y la ideología de género, y que acostumbra repetir el mantra multicultural «la diversidad nos hace fuertes», se encuentra a la vanguardia global en la ofensiva neomarxista para mandatar por ley la observación de esta doctrina ideológica.