La controversial estatua de Lenin ubicada en al ciudad estadounidense de Seattle, amaneció con un heteropatriarcal agregado: un pene de plástico colocado sobre la cabeza del líder de la revolución bolchevique.
La estatua del líder comunista había sido epicentro de contraprotestas de la nueva derecha en respuesta a la remoción de estatuas de líderes confederados que la ultraizquierda ha venido realizando recientemente.