En una entrevista en profundidad publicada en PAPEL, una de las voces más críticas y elocuentes respecto al feminismo y la corrección política se lamenta la falta de huevos – como diríamos en latinoamérica -, de la que adolece occidente y en especial los europeos.
La elección de palabras del escritor no es azarosa. La dificultad social para trazar límites de aceptabilidad a la conducta de los demás (en este caso los islamistas), el exceso de compasión casi patológico que exhiben estas sociedades, tienen ambos su origen en la estigmatización y marginalización de los hombres y en particular de los patrones culturales masculinos.
Trump, es la personificación de la antítesis hegeliana de la tesis neomarxista que gobernaba estados unidos y que gobierna aún europa y gran parte de américa latina. Sobre el tema Reverte comenta que:
«Los americanos tienen a Trump porque quieren. Nuestra clase política es el resultado de nosotros mismos» – Arturo Pérez Reverte
Consultado sobre el feminismo, con el que ya ha tenido múltiples cruces ( como este o este), Reverte volvió a fustigar el «folklorismo» del feminismo radical:
«No acepto el folclorismo estúpido, ultrarradical, fanático y analfabeto de algunas que se dicen feministas» – Arturo Pérez Reverte