Obligada por el crecimiento de la derecha, la canciller de Alemania ha tenido que dar un giro de 180 grados en su actitud respecto a la invasión migratoria islámica que ha causado estragos en toda Europa.
La opinión pública huye de Merkel y haya refugio en la derecha alternativa.
El acoso sexual masivo sucedido en la víspera de año nuevo en la ciudad alemana de Colonia, donde un estimado de 2000 musulmanes se organizaron para acosar sexualmente a cerca de 1200 mujeres alemanas, resultando varias de ellas violadas, ha sido quizás el hecho que ha desequilibrado más fuertemente la balanza de la opinión pública en contra de la doctrina migratoria Merkeliana.
La crisis de violaciones continúa sin embargo en todas las zonas donde se están alojando los «solicitantes de asilo», cuyo impacto en la opinión pública se hace sentir a pesar de los intentos desesperados de mitigarlo. Estos incluyen una campaña propagandística orientada a la protección de los agresores que hace a las víctimas reticentes a denunciarlos, y un esfuerzo gubernamental por censurar la cobertura de los actos de violencia protagonizados por islamistas, llegando al punto de organizar razzias contra sospechosos de publicar comentarios críticos respecto a la política migratoria y la conducta de los supuestos «refugiados».
El gran beneficiario del rechazo del pueblo alemán a las políticas anti-alemanas de Merkel, ha sido, como era de esperarse, la derecha nacionalista y en particular el partido «Alternativa para Alemania» AfD al que pertenece este legendario parlamentario:
El profundo rechazo generado por la actitud displicente y autoritaria de Merkel, al desestimar las alertas que indicaban la irresponsabilidad de esta política, y el constante goteo de agresiones contra la población nativa por parte de la importada, harán muy difícil que esta media vuelta tenga poder de convencimiento para hacer retornar a su partido a los votantes que ya se han ido al AfD, pero es posible que la ayude a desacelerar la pérdida de apoyo popular que está sufriendo.
Fuente: JihadWatch