Un turista chino que viajaba por Europa fue identificado por error como migrante musulmán en Alemania al intentar denunciar un robo y fué obligado a pasar dos aterrorizantes semanas en un campamento de refugiados.
El mochilero de 31 años sufrió el robo de su billetera en pleno recorrido turístico. Cuando fue a hacer la denuncia se equivocó y en lugar de dirigirse a la estación de policía, fue al ayuntamiento de Heidelberg, donde como no habla ni inglés ni alemán, no pudo hacer entender su intención y fué confundido por los burócratas del ayuntamiento con uno más de los cientos de miles de migrantes musulmanes que llegan a Alemania en busca de los beneficios que el gobierno les ofrece.
El ciudadano chino, firmó un formulando creyendo que era parte de la denuncia pero en realidad estaba completando una solicitud de asilo al gobierno.
Sin entender lo que estaba sucediendo, fue despojado de su pasaporte y visa, recibió documento de refugiado, fue examinado por médicos y sus huellas dactilares fueron escaneadas. En ningún momento ofreció resistencia ni pidió explicaciones.
Así pasó casi dos semanas en un centro migratorio de Dortmund, donde recibió alimentación diaria, disfrutó de una cama y recibió dinero del gobierno alemán.
Al llamar la atención por su educación y buena vestimenta, personal de la Cruz Roja consiguió un hablante nativo de mandarín y así lograron descubrir la historia del migrante accidental que en realidad deseaba continuar sus vacaciones por Roma y París.
Fuentes: Dülmener Zeitung, Rheinische Post