Japón ha vuelto a demostrar a las naciones de occidente lo que significan la independencia y la soberanía frente al prepoteo feroz de las organizaciones internacionales de la órbita de la ONU.
Hábitos de Independencia:
Hace algunos meses ya había rechazado un pedido de ONU Mujeres para que censurara videojuegos y producciones de anime que el comando central feminista considerase como «sexistas».
Refugiados Sirios que no tienen nada de Sirios ni de Refugiados
Ahora los burócratas de la ONU volvieron a instar a Japón, pero esta vez para que acepte esta masiva corriente migratoria – no espontánea sino impulsada desde las mezquitas y desde algunas organizaciones gubernamentales y paragubernamentales en occidente – desde países musulmanes hacia países del primer mundo que se presentan en los medios internacionales como «refugiados sirios» pero que en los hechos el porcentaje de sirios entre estos migrantes es una minoría.
Hace no mucho tiempo, el país asiático había mostrado cierta solidaridad con las víctimas del conflicto armado en Siria e incluso se mostraron dispuestos a recibirlos. Pero quizás luego de ver que hay gato encerrado, y ser testigos del salvaje comportamiento que estos migrantes han desplegado para desgracia de la población nativa europea, parecen haber impulsado al gobierno japonés a cambiar de opinión.
El reemplazo poblacional no es una solución aceptable para la crisis demográfica
Shinzo Abe, el primer ministro de Japón fue claro días atrás: el país no puede pensar en otra cosa que no sea elevar la tasa natalidad y reducir el envejecimiento, que se presentan como uno de los principales retos demográficos. Pero, mostrando la visión – o la falta de desprecio por su propias tradiciones y cultura tan típica de los gobernantes europeos actuales – Abe reconoce que la solución al dilema demográfico no puede pasar por el reemplazo poblacional que acarrearía el desplazamiento de la población nativa a manos de la importada y la destrucción de la identidad, la cultura y el carácter que hacen a la esencia de su nación.
Además, otro de los objetivos que se plantea el gobierno de Abe es conseguir un fortalecimiento del sistema de seguridad social para ayudar las familias, por lo que no es el momento oportuno. “Hay muchas cosas que debemos hacer antes de aceptar inmigrantes «, expresó de manera contundente Abe.
Sin embargo, colaborará aportando dinero y asistencia a los refugiados, en su intento de ir hacia Europa desde el Oriente Medio y África. Así lo expresó en la Asamblea General de la ONU.
FUENTE: observatorial.com
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