El presidente estadounidense Donald Trump expresó su preocupación por la escalada de violencia religiosa que ha generado la quema de iglesias y persecución de cristianos en Nigeria. Muhammadu Buhari, presidente nigeriano, no encuentra solución a la avalancha de crímenes y ataques que sufren los cristianos en la región central de su país.
La condena de estos hechos por el presidente norteamericano, que se dan en un país muy fuerte en su pensamiento extremista, no solo desde lo meramente religioso sino también con actuación de grupos de ISIS. Los terroristas islamistas han sabido dotar de armas a diferentes grupos étnicos de la región que han estado atacando a los cristianos, que se dedican a la agricultura.
Estos ataques de etnias nómadas, han generado más muertes que Boko Haram, y llamó a la Cámara de Representantes de Nigeria a pedir cuenta a Buhari. Algo similar se dio entre los líderes de la iglesia que han condenado fuertemente el fracaso gubernamental para hacer frente a esta problemática.
FUENTE: La Resistencia