Hoy las redes sociales del río de la plata hirvieron con todo tipo de ironías, improperios y condenaciones solemnes a los dichos del cantante de Bersuit Vergarabat Gustavo Cordera, que muchos interpretaron erróneamente como una apología de la violación.
¿Qué dijo Cordera?
Al responder a una pregunta sobre su opinión acerca del caso de Cristian Aldana, un músico Argentino que fue linchado mediáticamente por el feminismo, al descubrirse que había tenido sexo consensual con fans adolescentes, algo que por cierto, en el ambiente del rock y la cumbia rioplatense por igual es costumbre asentada, «el pelado» expresó en su típico tono – a mi gusto grosero – pero que forma parte de su marca personal, su desacuerdo con que se condene a un hombre por tener sexo con una chica de 16 años cuando es ella la que toma la iniciativa.
Después de esto, dijo lo siguiente::
«Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente» – Gustavo Cordera
Esta fue la frase que se sacó de contexto y la que motivó la violenta reacción de los valores y dublés neomarxistas en las redes sociales, y de los que simplemente vieron un titular y reaccionaron como toda persona que inocentemente cae en las trampas de los titulares.
Cómo los medios se lo presentaron al público
Como es costumbre, los medios no hicieron el mínimo esfuerzo por contextualizar los dichos de Cordera, sino que al contrario, buscaron sacar de contexto la frase, en deliberada búsqueda del efecto, de la ofensa.
«Pelado» Cordera: «hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo» – Titular de Subrayado
Gustavo Cordera y su repudiable declaración: «Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo» – Titular de La Nación
Aberrante declaración de Cordera: «Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo» – Titular de MinutoUno
La histeria colectiva generada
Esto llevó comprensiblemente a muchas personas a apresurarse a condenar y reclamar castigo contra Cordera en base a la interpretación descontextualizada y paranóica a la que conducen estos titulares.
Como bien aclaró Mario Pergolini, no se puede sacar una frase de contexto, y condenar a alguien por como suena en el acortado.
¿Existen mujeres que fantasían con ser violadas?
Lo que dice Cordera, además, no es falso. No solo es cierto que existen mujeres para las que la violación es una fantasía sexual, sino que según varios estudios (1, 2) más de la mitad de las mujeres en edad universitaria confiesan haber tenido esta fantasía. Que estos datos de la realidad, contradigan las bases de la teoría feminista, es un tema distinto.
El éxito de literatura erótica como 50 Sombras de Gray, también ilustra las profundas contradicciones entre el deseo sexual real de muchas mujeres, y la teoría feminista.
Los linchamientos femifascistas
Lo más preocupante es que hay muchas personas a las que la doctrina neomarxista, y en particular el feminismo, las ha predispuesto a reaccionar violentamente ante un hombre que diga cualquier cosa negativa respecto del género femenino, por cierta que sea, (porque la sumisión es es la única actitud políticamente correcta que puede tener un varón respecto a la mujer actualmente).
Estos son los progrebots, los soldaditos digitales de la batalla cultural neomarxista, quienes entre otros despliegues de valentía revolucionaria y coherencia perfecta, amenazaron a Cordera con violar a sus hijas.
Pero los linchamientos no solo son mediáticos, hace algunos días comentábamos en nuestra página de Facebook el caso del chico al que intentaron robar en el subte, fué acusado de acosar sexualmente al pasaje por los maleantes al verse descubiertos, y milagrosamente logró salvarse de ser linchado.
Unos meses atrás, fué un científico de la NASA que puso una sonda en un cometa, quien perdió su trabajo por usar una camisa que les dió la excusa perfecta para señalarlo como la próxima víctima.
La normalización de los linchamientos
Esta actitud fascista y patoteril, además, esta intentando llegar a las leyes. El proyecto de Ley de Violencia de Género presentado en Uruguay es un reflejo de esta actitud, al ignorar el derecho a la presunción de inocencia de los acusados, y al permitir que una mujer asesine a su esposo si se siente «emocionalmente alterada».
Asistimos a la aparición de este sistema coercitivo por fuera de la legalidad, mediante el que los simpatizantes de la ideología neomarxista (el feminismo y la teoría de género, el reparacionismo racial, etc.), se autoatribuyen el derecho de castigar inmediatamente el «crímen ideológico» de omitir una opinión que pueda entrar en contradicción con su dogma ideológico.
El condicionamiento neomarxista contra la libertad de expresión
Cuando los medios señalen a otro pobre cristiano como objetivo del nuevo linchamiento mediático, estos seres condicionados para estallar violentamente contra las opiniones «incorrectas», volverán a levantar el rastrillo y se aprontarán a quemarle el rancho a quién sea que tenga la mala suerte o la valentía de opinar algo distinto.
Más que la elección de palabras de Cordera, lo más preocupante me parece que es esto. Que la gente que no sabe pensar, los que saltan a condenar por arco reflejo, no dejen expresarse a nadie que tenga una opinión ni medianamente distinta a la suya. ¿Dónde quedaron los ideales de la pluralidad, la tolerancia y la diversidad de opiniones, la moderación, el respeto al otro ser humano?
¿Queremos que todo el mundo tenga que andar pensando y re-pensando como dice lo que dice, porque podría despertar la furia de esta inquisición posmoderna?
Los medios son cómplices de la avanzada fascista
Quienes piensan que estos linchamientos son un arrebato espontáneo de furia, por parte de una masa inocente, se equivocan. La gente reacciona como reacciona, porque es condicionada culturalmente para reaccionar así.
Estos linchamientos no son episodios aislados, sino un patrón de conducta, sugerido por medios que constantemente enaltecen a los grupos elegidos (mujeres, transexuales, afrodescendientes, musulmanes), y fustigan a varones, heteros, blancos y occidentales, ocultando y justificando la violencia contra estos grupos.
El objetivo del neomarxismo al promover estos linchamientos es el de silenciar el cuestionamiento de sus dogmas a través de la violencia. Esto es el verdadero fascismo, atacar a todo el que se atreva a expresar una posición distinta, y justificar esos ataques en base al mito de una opresión imaginaria.
¿Realmente creen que la gente de los medios no sabe que están sacando de contexto lo que dice Cordera? Lo sabe muy bien. Y lo usa para recordarnos a todos quiénes son los que determinan en nuestra sociedad qué se puede decir y qué no.
El linchamiento del que la única víctima fue Cordera, ha sido una nueva demostración de poder de parte de quienes controlan los medios y del costo que tiene poner en duda el discurso hegemónico, aún siendo un artista famoso.
No voy a contradecir la opinión oficial de Varones Unidos, las declaraciones de Cordera fueron desafortunadas, pero hablando en serio ¿No es mucho más grave el desarrollo de este fascismo cultural, que un músico que se expresó de forma grosera? ¿Por qué no hablamos mejor de eso?